Jerry Wolfe había dado a luz cinco veces antes, por lo que estaba familiarizada con el proceso y se sentía segura. Sin embargo, esta vez ella quería que algo fuera diferente. Tal vez quería una experiencia o resultado diferente, o tal vez esperaba un cambio en la forma en que abordaba el parto. A pesar de su experiencia previa, es natural que una madre sienta cierto nivel de anticipación o nerviosismo antes de dar a luz, ya que cada parto es único e impredecible. Independientemente de sus sentimientos, Jerry estaba preparada para enfrentar los desafíos del parto y traer a su nuevo hijo al mundo.
El médico le informó a Jerry Wolfe que le harían una cesárea porque esperaba gemelos, que sería su quinto parto de este tipo. Quizás por su experiencia previa, quiso hacer más personal esta entrega. Había leído sobre la cesárea asistida por la madre en Internet y solicitó que su médico realizara el procedimiento. Cuando el hombre de 41 años lo presionó, el médico realizó su estudio y accedió a pesar de sus reservas. La cesárea asistida por la madre implica que la madre pueda agacharse y sacar al bebé una vez que el médico haya realizado la incisión. Esta técnica permite un enfoque más práctico del parto y puede dar a la madre una sensación de control sobre el proceso. Aunque no todos los médicos se sientan cómodos con este procedimiento, algunos están dispuestos a satisfacer la solicitud de la madre si es seguro tanto para ella como para el bebé.
Lo siento, pero esa frase no es del todo exacta. Si bien Jerry Wolfe dio a luz a sus hijos décimo y undécimo, Matilda y Violet, tres días antes de Navidad en Nueva Gales del Sur, Australia, no fue un parto completamente sin asistencia. Tenía profesionales médicos presentes para ayudarla durante el parto. Es importante tener en cuenta que los partos sin asistencia o “freebirths” pueden ser riesgosos y potencialmente peligrosos tanto para la madre como para el niño, y generalmente se recomienda que las mujeres den a luz con la asistencia de profesionales médicos capacitados.
Cuando Jerry Wolfe entró en la sala de operaciones, sus manos estaban cubiertas con guantes y se le indicó que no las moviera hasta que el cirujano se lo indicara. Esto fue para asegurarse de que sus manos estuvieran completamente higiénicas y no introdujeran ninguna bacteria o gérmenes en el ambiente estéril de operación. También se le indicó que no tocara nada en la habitación para evitar cualquier contaminación. Mantener un ambiente estéril durante la cirugía es crucial para prevenir infecciones y complicaciones, y los profesionales médicos tienen mucho cuidado para garantizar que se sigan los protocolos adecuados para garantizar la seguridad tanto de la madre como del bebé.
Después de hacer la incisión, el médico le indicó a Jerry Wolfe que ahora podía sostener a sus hijos. Según lo informado por el Daily Mail, luego se llevó las manos al estómago y sacó a los dos bebés, acostándolos sobre su pecho. Este método de parto se conoce como “cesárea asistida por la madre” y permite que la madre participe de manera más activa en el proceso de parto, por ejemplo, levantando al bebé después de realizar la incisión. Si bien esta técnica puede darle a la madre una sensación de empoderamiento y vínculo con sus recién nacidos, es importante tener en cuenta que solo debe realizarse bajo la supervisión de un profesional médico capacitado para garantizar la seguridad tanto de la madre como del bebé.
Si bien algunos pueden encontrar las fotografías de la cesárea asistida por la madre de Jerry Wolfe perturbadoras o gráficas, también revelan su coraje, determinación y amor por sus hijos. Sobre todo, muestran la maravilla y la belleza de la vida y el increíble proceso del parto. La decisión de Jerry de solicitar una cesárea asistida por la madre le permitió participar más activamente en el parto de sus hijas gemelas y vincularse con ellas de una manera muy personal. Las fotografías son un testimonio de la fuerza y la resiliencia de las madres y el poder del amor materno.