Keira Rυmble tuvo seis embarazos exitosos, pero no dio a luz y fue diseñada para dar a luz a un bebé sano y convertirse en “la mamá más feliz del mundo”, como se describe a sí misma.
Específicamente, dentro de tres años, intentó seis veces tener un hijo, y el último intento fue el más difícil de todos, ya que sufrió durante días con dolor insoportable.
Los dolores eran tan severos que la tuvieron que guardar cama durante días, y cuando finalmente visitó a su médico, le dijeron que era muy grave, y ella sintió mucho dolor.
Sin embargo, después de un año, a pesar de estar decepcionada, se sometió a una FIV, que fue un éxito, y el 5 de julio dio a luz a su bebé, Höter Philip Harris, que nació prematuramente a las 36 semanas.
Como ella enfatizó, “cómo me siento muy apegada a él, a pesar de que cuando nació, solo lo sostuve durante 30 segundos. Él entonces fue directamente al cuidado intensivo y se le dio 100% de oxígeno para sobrevivir. Cuando lo tomé por primera vez en mis brazos, estaba magullado y luchando por respirar”.
Y agrega: “Aunque lo amaba, no sentí una relación especial con él desde el principio, como esperaba. No ser capaz de abrazarlo y abrazarlo lo hizo aún más difícil”.
Sin embargo, la mamá más feliz del mundo dice que eligió compartir su viaje a la maternidad para dar coraje y un mensaje de esperanza a todas las mujeres que están tratando de tener un hijo.
Con el 15 de octubre siendo el Día del Recuerdo de la Pérdida del Embarazo y la Pérdida de Peso, Rυmble quiere dar esperanza a las mujeres que aún intentan recuperar a sus familias y hacerles saber que no están solas.
“Durante dos años y medio, experimenté pérdidas después de seis embarazos fallidos. Hoy, sin embargo, estoy finalmente sosteniendo a mi bebé en mis brazos”, concluyó.