Las serpientes son bien conocidas por tragarse a sus presas enteras, pero la fortuna de esta desafortunada serpiente parece haber cambiado.
La fotógrafa Julie-Anne O’Neill se atribuyó el mérito de la imagen en una publicación de Google+ en noviembre de 2016. Allí escribió que esta imagen de una rana arbórea verde australiana comiendo una serpiente marrón se tomó de noche con una Canon EOS 550D. (Sin embargo, como la imagen se ha visto en línea antes de su publicación, su afirmación no se puede confirmar). O’Neill agrega:
“Antes de la captura, me habían hecho creer que solo comían insectos. La serpiente marrón australiana es muy venenosa. Aunque la serpiente había mordido a la rana, como verás si amplías la foto, la rana sobrevivió. Sin embargo, no fue un final tan feliz para la serpiente…”
De hecho, la expresión del rostro de la serpiente es comparable a la del pez fotografiado dentro de una medusa, para quien probablemente el final tampoco fue feliz.
Fuente: earthlymission.com